jueves, 14 de julio de 2016

Y ESTA NOTICIA NOS HA LLENADO DE ESPERANZA EN EL SENTIDO DE QUE TARDE, PERO LA JUSTICIA LLEGA

Recordarán muchos de ustedes aquellas noticias sobre una secuela de suicidios en France Telecom en la primera mitad del siglo XXI producida por recortes en la empresa que dejaban desempleados un conjunto inmenso de trabajadores. Ahora vean lo publicado recientemente:

DESPUÉS DEL SUICIDIO DE 60 TRABAJADORES, LA EMPRESA ES CONDENADA JUDICIALMENTE POR ACOSO MORAL.
Después de siete años de investigaciones sobre una ola de suicidios en la empresa telefónica FRANCE TELECOM, la Justicia francesa solicitó este viernes 7 la apertura de un proceso por "acoso moral" contra el grupo y su ex-presidente Lombard. Entre los años del 2006 al 2009, unos 60 empleados se suicidaron a partir de un anuncio hecho sobre la reestructuración de la sociedad.
Todo comenzó en una reunión de altos funcionarios de la empresa, cuyo nombre actual es ORANGE, el día 20 de octubre de 2006. El encuentro debía ser una operación de "motivación" de los equipos, aplicando una estrategia común de las grandes empresas, entre cuyos objetivos el Presidente de la sociedad en aquella época, Didier Lombard, debía anunciar el despido de 22 mil empleados, debiendo cambiar su cargo otros 14 mil. La decisión se basaba en el endeudamiento de la empresa. La cuenta de France Telecom se aproximaba en aquel entonces a 50 billones de euros.
"Esas personas saldrían de la empresa de cualquier manera, por la puerta o por la ventana" había dicho Olivier Barberot, Director de Recursos Humanos. Las consecuencias de lo dos programas aplicados fueron dramáticas en la práctica. Un total de 60 personas se suicidaron en tres años, 35 solamente entre 2008 y 2009. Los sindicatos franceses calificaron esta gestión como "brutalidad extrema". Pero para Lombard, la ola de muertes bajo su gestión fue solamente una cuestión de moda, aunque fue una declaración que le obligó a renunciar.
Clima de ansiedad para "Desestabilizar a los trabajadores"
Durante cuatro años, la Justicia de París analizó millares de correos electrónicos, presentaciones de power point, interrogó decenas de empleados y altos funcionarios. La conclusión del informe fue que se trató de "incidentes frecuentes" con el objetivo de "desestabilizar a los trabajadores", creando un "clima profesional de ansiedad" para acelerar los pedidos de despido. Al final del documento de 193 páginas, la conclusión es categórica: "siete ex-dirigentes de France Telecom, deben ser procesados". 
Se citaron 39 víctimas, especialmente en el período de 2006  2011: 19 cometieron actos de suicidio y 12 en tentativa, siendo 8 los que sufrieron depresión o pidieron licencia. 
Se ha radicado como un proceso de acoso moral para otros dos ejecutivos: Barberot y al número dos de la Empresa, Louis-Pierre Wenes. Hay otros cuatro ejecutivos acusados de complicidad.

 



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