Contribuyo con divulgar la siguiente declaración adoptada recientemente en Mar del Plata.
Los/as representantes de las Organizaciones Sindicales de la Confederación Sindical de Trabajadores/as de las Américas, CSA, de UGT y CC.OO de España, de las Federaciones Sindicales Internacionales reunidos/as en Mar de Plata, Argentina, con ocasión del I Encuentro Sindical Iberoamericano, bajo los auspicios del Gobierno de Argentina y de la SEGIB, teniendo como marco la XX Cumbre Iberoamericana de Jefes y Jefas de Estado y de Gobierno, que se celebrará en la ciudad de Mar del Plata, los días 3 y 4 de diciembre de 2010, acuerdan la siguiente Declaración:
CONTEXTO ECONÓMICO Y SOCIAL
a) Contexto mundial: Crisis del empleo
A dos años del inicio de la crisis financiera, económica y social, que ha perjudicado a millones de trabajadores y trabajadoras y a sus familias, afectando particularmente a las mujeres y a las personas jóvenes, es fundamental que los gobiernos establezcan estrategias de recuperación económica centradas en políticas integrales dirigidas a la reconstrucción del tejido productivo y a la creación y fortalecimiento de Trabajo Decente.
En el último año, la crisis se ha profundizado y se expresa de manera dramática. En ese sentido preocupa que las respuestas gubernamentales se alejen de las salidas enmarcadas en la protección del empleo productivo y el trabajo decente. Esta grave situación ha lanzado a los sindicatos de los países Ibericos y la Confederación Europea de Sindicatos (CES) en un plan de movilización y lucha, que cuenta con la plena solidaridad del sindicalismo latinoamericano.
En América Latina algunos gobiernos pretenden profundizar las reformas laborales regresivas, que ya habían aplicado en años anteriores, ahora con el pretexto de salida a la crisis. En este contexto de fuerte presión económica y tensión social, es fundamental reforzar los mecanismos de diálogo social, en base al respeto a la libertad sindical y la negociación colectiva.
b) El Pacto Mundial por el Empleo para salir de la crisis
En el contexto de la crisis, los gobiernos deben reconocer la relevancia de la Resolución “Para recuperarse de la crisis: Un Pacto Mundial para el Empleo”, emanada de la 98° Conferencia Internacional de Trabajo de la OIT, junio 2009, destinadas a estimular la recuperación económica, a generar trabajo decente y empleo productivo, y a proteger a los/as trabajadores/as, y en especial a mujeres y jóvenes.
Frente al modelo neolibral es imprescindible recuperar y fortalecer el papel del Estado como promotor del desarrollo e impulsor de políticas para una redistribución justa de la riqueza. En dicho sentido, es necesaria la seguridad en los ingresos y la protección social de todos los trabajadores/as desocupados.
Reiteramos el valor del diálogo social efectivo y la negociación colectiva como medios idóneos para mejorar las condiciones de trabajo, la estabilidad social y el crecimiento económico, así como un medio para valorizar socialmente el trabajo, establecer sistemas de relaciones de trabajo justas y una distribución más equitativa de la riqueza, que acompañe el aumento de la productividad laboral. Ratificamos que sin justicia social no existe realmente la democracia y falla la base de un buen gobierno.
EN ESTE CONTEXTO DE CRISIS ECONÓMICA Y DE EMPLEO LAS ORGANIZACIONES SINDICALES SIGNATARIAS HACEMOS LAS SIGUIENTES PROPUESTAS:
a) La Educación, la Formación para el Empleo y la Formación Sindical requisitos para el desarrollo
El movimiento sindical comparte el enfoque de la UNESCO de que la educación constituye un requisito indispensable para alcanzar los objetivos internacionales del desarrollo. Efectivamente, la educación es un derecho humano fundamental y un requisito imprescindible en las estrategias de recuperación económica o de desarrollo de los pueblos y sociedades. Resaltamos la importancia de una visión integral de la educación considerada como un derecho humano fundamental de las personas y que debe las acompañar a lo largo de toda su vida.
La Educación y la Formación como puente para la integración regional
La ausencia de Educación y Formación no puede ser una barrera en la libre circulación de los/as trabajadores/as entre los países de la región. El desarrollo profesional de las personas implica, realizar desde los Estados, un esfuerzo conjunto con los actores sociales en el diseño y homologación de títulos y certificaciones como puente a la integración educativa, cultural y social de nuestros pueblos.
Educación para la vida
Sobre la educación formal planteamos la necesidad de que las políticas públicas integren el concepto de una educación para todos y todas a lo largo de la vida, que sea integral, continua, gratuita, obligatoria, pública, laica, de calidad, con igualdad de oportunidades y con acceso para todas y todos, posibilitando el ejercicio de su ciudadanía, y desarrollando la capacidad individual y colectiva para transformar la realidad y para mejorar la calidad de vida.
La educación formal, la formación para el trabajo y la formación sindical deben ser objetivos estratégicos prioritarios de los gobiernos iberoamericanos y reflejarse en las políticas presupuestarias, en la mejora de las infraestructuras, de los salarios y prestaciones de los trabajadores y trabajadoras en su capacitación y empoderamiento en la gestión y dirección de las centros educacionales.
Educación para todos y todas
El déficit de la cobertura en educación es una constante. Por lo tanto, el tema de la XX Cumbre Iberoamericana es de suma importancia para generar una voluntad política internacional que logre reducir los niveles de desigualdad y exclusión en materia de educación y formación.
La exclusión en educación siempre va unida al tema de la pobreza y a la discriminación social y de género como reconoce la UNESCO. La educación de las mujeres y de los/las jóvenes trabajadores/as con objetivos de inclusión adquieren una prioridad de primer orden.
Formación para el empleo en el marco de una visión integral
La formación o capacitación para el trabajo no debe ser única y exclusivamente técnica sino que debe insertarse dentro una visión más amplia, a saber, en una formación para el trabajo decente y para la vida. La formación para el trabajo debe capacitar para un desempeño más eficiente del trabajo en el marco de los cambios tecnológicos, pero también debe capacitarse para ejercer la democracia y la participación en las empresas y para defender los derechos laborales fundamentales.
En la formación profesional es clave favorecer una participación sindical para desarrollar capacidad de propuesta y de incidencia.
Formación sindical para la construcción de sociedades democráticas
La formación de los trabajadores y trabajadoras es y debe ser obra de los propios trabajadores/as y debe contar con el apoyo de los gobiernos. para que el movimiento sindical, en el marco de su autonomía e independencia y del diálogo social esté en capacidad de responder estratégicamente a los grandes desafíos que presenta la construcción de sociedades realmente democráticas, inclusivas y sostenibles.
Construir puentes y alianzas entre la educación formal, la formación para el empleo y la formación sindical
El movimiento sindical apuesta por la creación de sistemas nacionales de educación donde todas las instituciones y programas existentes en educación formal y formación para el empleo se articulen e interactúen. En este sentido es urgente crear puentes y alianzas entre los distintos actores, sujetos e instituciones de los sistemas educativos nacionales.
b) Protección y la Seguridad Social Universales para salir de la Crisis
Es urgente y necesario que nuestros países definan estrategias nacionales en Seguridad Social y políticas públicas en salud (preventiva y curativa), pensiones, prestaciones familiares, maternidad, accidentes de trabajo y enfermedades profesionales y muy especialmente en el desempleo con prestaciones y servicios de empleo como mecanismos de inclusión laboral.
Promovemos la ratificación e implementación del Convenio 102 de la OIT, en tanto norma mínima de Seguridad Social, y referente normativo internacional, al establecer criterios y reglas claras para la cobertura de las contingencias básicas de Seguridad Social. Los sistemas de asistencia y seguros a los desempleados constituyen simultáneamente un mecanismo de inclusión social a quienes han perdido su trabajo, con actuacioes específicas favorables a los colectivos en situación de mayor vulnerabilidad, como los/as trabajadores/as migrantes.
El Convenio Multilateral Iberoamericano de Seguridad Social
Resaltamos la importancia del Convenio Multilateral Iberoamericano de Seguridad Social, para invalidez, vejez y supervivencia, que debe ser aprobado y aplicado con rango de ley, así como el convenio similar ya vigente (desde 2005) en el Mercosur.
Es urgente contar con un instrumento de coordinación de legislaciones nacionales, así como la adhesión y ratificación al Convenio Iberoamericano Multilateral de Seguridad Social, así como la suscripción del Acuerdo de Aplicación del mismo por parte de los países pendientes de hacerlo.
La Estrategia Iberoamericana de Seguridad y Salud en el Trabajo (EISST)
La pasada Cumbre de Lisboa (2009) ratificó el apoyo de los Jefes de Estado y de Nación a la Estrategia Iberoamericana de Seguridad y Salud en el Trabajo (EISST 2010-2013), las organizaciones sindicales hacemos un llamado explícito a los Gobiernos de la Región para que asuman los compromisos allí acordados, pongan en marcha los mecanismos de diálogo social tripartito y adapten y apliquen en sus respectivos países las acciones y actividades que dicha Estrategia contempla.
Igualmente pedimos a la OISS (Organización Iberoamericana de Seguridad Social) que ponga en marcha las Comisiones Subregionales para el desarrollo de la EISST acordadas de forma tripartita en el Congreso de Prevencia (Granada, España, mayo 2010). Las Comisiones deberán servir para dinamizar la puesta en marcha y aplicación de la EISST en todos los países.
CONSIDERACIONES FINALES
En el marco del compromiso del sindicalismo iberoamericano con el fortalecimiento de la democracia y el pleno respeto a los derechos humanos, mantenemos nuestra condena a todas las formas de violencia antisindical, persecución y criminalización de la protesta social en nuestros países. En este sentido reafirmamos que la justicia social se convierte en el verdadero termómetro de la democracia y la injusticia social pone en grave peligro su vigencia.
Mantenemos el llamado a la Comunidad Iberoamericana para el no reconocimiento del ilegítimo gobierno establecido en Honduras y condenamos la violencia que se ejerce contra los sindicatos y otros movimientos sociales de ese país, así como la imposición de medidas que profundizan la situación de pobreza y exclusión de los trabajadores y pueblo hondureño.
Finalmente expresamos nuestro agradecimiento a la Secretaría General Iberoamericana, SEGIB, por el apoyo para la concreción del Encuentro Sindical Iberoamericano, como un espacio permanente y oficial en el marco de las Cumbres Iberoamericanas de Jefes y Jefas de Estado y de Gobierno atendiendo a una demanda del sindicalismo de la región. Igualmente nuestro agradecimiento al Gobierno de la República Argentina por apoyar de manera determinante la realización de este primer Encuentro Sindical Iberoamericano.
Mar del Plata, República Argentina, 3 de Diciembre de 2010
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